Cada día hombres y mujeres tratan de saciar su hambre;algunos se esmeran por consumir productos más naturales (que no contengan contaminantes)otros, aunque tendrían la misma intención, deben consumir lo que el mercado les ofrece y a veces (especialmente las clases sociales de menores ingresos, deben comprar alimentos de bajas calidades) Pero aquí nos referiremos a otro tipo de alimento, que la gran mayoría de las personas a dejado de consumir, o consume en pequeñas dosis y es el alimento espiritual.
Tengo sobre mi mesa de Trabajo; decía el Pastor Omar, un libro, se titula Elementos básicos de la vida Cristiana y fue escrito por el Pastor Witness Lee y Watchman Nee; en él se refieren algo muy importante; cómo nutrir nuestro espíritu; te contamos cómo hacerlo.
Es impòsible que algún Cristiano que emplee diariamente menos de media hora en la Presencia del Señor sea adecuadamente espiritual y sano.Este es un principio fijo ¿puede alguien estar saludable si no come diariamente?
Si hacemos esto diariamente Jesucristo efectuará un gran cambio en nosotros.Nuestra experiencia de Cristo se profundiza y con el tiempo podremos influir más en otros.
Toda la situación entre nosotros cambiará radicalmente, no por enseñanza, ni por estudio; sino al tener contacto con el Señor.
Debemos pagar el precio y emplear este tiempo en oración, por el bien de nuestro crecimiento espiritual.
El Reverendo Paul C Jong expresaba sobre este tema lo siguiente.
¿Tienen problemas o ansiedades? Entonces, oren a Dios con la fe que cree en Su Palabra. Los problemas y las ansiedades surgen cuando no rezamos a Dios para que nos ayude. Deben creer en Él mientras rezan con fe. Entonces El responderá sus plegarias.
Debemos vivir con fe en la Verdad de Dios, el Evangelio del agua y el Espíritu, y estar suficientemente agradecido a Dios por habernos permitido curar las enfermedades espirituales de la gente.
Si estamos preocupados, debemos orar a Dios con confianza. El Señor responderá a nuestras oraciones sin duda alguna, nos dará paz y resolverá nuestros problemas. Por eso debemos rezar en todo momento y sin cesar (1 Tesalonicenses 5, 17).
Sin duda tenemos hambre del alimento verdadero, es hora de comenzar dedicando media hora a la oración , que nos permitirá saciar nuestro apetito existencial.
Néstor O Salgado
Evangelista de Misión Nueva Vida Casbas
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